¡ESCÁNDALO! LEOCADIA ENTREGA A ÁNGEL AL CAPITÁN || CRÓNICAS de la serie La Promesa
En la promesa, una boda marcada por el chantaje y el miedo
En La Promesa, todos sabemos que las bodas nunca llegan envueltas en alegría. Aquí, cada compromiso esconde secretos oscuros y cada enlace no es más que una cadena disfrazada de celebración. Y ahora, lo que parecía un anuncio de unión se transforma en una pesadilla: Leocadia se enfrenta a la decisión más desgarradora de su vida. Su hija Ángela está a punto de ser obligada a comprometerse oficialmente con el capitán Lorenzo de la Mata. Una unión que no nace del amor ni de la ilusión, sino del miedo más profundo.
Avance semanal de ‘La promesa’: La decisión de Manuel hace temblar los cimientos de La Promesa para siempre – La promesa
Leocadia intenta justificar su decisión, diciendo que no tiene alternativa y que lo hace para proteger a su hija, recordando que el capitán la liberó del secuestro a cambio de esa promesa. Pero en el fondo, todos sabemos que esa no es la verdad completa. Lo que Leocadia teme más que nada no es la pérdida de la libertad de Ángela, sino que Lorenzo revele lo que sabe. Una revelación así no solo destruiría su imagen de dama respetable, sino que sería su ruina definitiva y, quizás, también la de Ángela.
Para Leocadia, no hay mayor humillación que ver a su hija en brazos del bastardo de los Luján. Y así, aceptar la propuesta del capitán le parece no solo la forma de callar su boca, sino también el modo de separar a Ángela de un amor que considera indigno. Lo paradójico es que, aunque deteste a Lorenzo, en este punto lo ve como un mal necesario: un hombre que la repugna, pero que puede servirle para mantener a raya a Curro. Un pacto firmado con miedo y con rabia.
En medio de este escenario, los verdaderos protagonistas de la historia, Ángela y Curro, ven cómo su amor se tambalea. Han luchado en silencio, compartiendo besos robados y caricias furtivas, enfrentando a escondidas la desaprobación de los demás. Para ellos, cada encuentro era un acto de valentía, pero ahora ese compromiso forzado amenaza con destruir de un plumazo todo lo que han soñado.
Ángela se encuentra ante un dilema imposible: obedecer a su madre y resignarse a un destino cruel, o rebelarse y arriesgarlo todo por el hombre que ama. Mientras tanto, Curro también vive su propio tormento. No hace tanto perdió a su hermana Hann en trágicas circunstancias, después a su madre Eugenia. Y ahora parece que el destino le quiere arrebatar también a Ángela. ¿Cómo soportará ver a la mujer que ama unida al hombre que más odia?
Todo apunta a que este conflicto será el inicio de una guerra en la que el amor se pagará con lágrimas y sangre. Lo que se avecina no es una boda, sino un campo de batalla disfrazado de altar. Leocadia podrá excusarse diciendo que lo hace por el bien de su hija, pero todos saben que la verdadera razón es el miedo a que sus secretos más oscuros salgan a la luz.
Ángela tendrá que decidir si acepta esa condena o si rompe las cadenas y se enfrenta tanto a su madre como al capitán. Y conociendo su carácter indomable, no parece probable que se rinda sin luchar. Por su parte, Curro deberá elegir entre resignarse a perderla o desafiar al mismísimo Lorenzo en nombre del amor.